DE UTOPÍA A REALIDAD

Estábamos hartas de trabajar en trabajos con jornadas laborales infinitas y sueldos que dejaban mucho que desear. Cansadas de repartir mil currículums y solo encontrar trabajos temporales dónde, además no cotizábamos ni la mitad de horas… Fantaseábamos en ser nuestras propias jefas, en tener un horario a nuestro gusto, decidir cuando y cuanto tiempo trabajar, un trabajo que nos gustase, que nos llenase como personas, que no chocara con nuestros ideales y que además ayudara a mejorar este mundo. Fue a raíz de todo esto que decidimos crear nuestra propia empresa. Evidentemente no fue de un día para otro, ni lo que es ahora Utopik fue nuestra idea inicial. Hemos ido evolucionando con el tiempo y moldeando este proyecto ajustándose cada vez más a lo que seria nuestro empresa ideal (queda aún mucho camino…)

Todo empezó en Ibiza (esa isla mágica….)

Era el verano del 2014, hacía tiempo que buscábamos la forma de ser autosuficientes en el trabajo. Un par de años antes habíamos intentado vender en los Hippy Markets de la isla, nuestra artesanía. Sin mucho éxito , pero con mucha diversión. Nos gustó la idea.

Decidimos aprovechar los viajes que hacíamos por África para comprar cestos de mimbre básicos, customizarlos, decorarlos y venderlos en Ibiza. Y así hicimos. Y bueno… digamos que los años de oro de la isla ya fueron y si, sobrevivímos y nos divertíamos mucho (mucho , mucho , mucho ) , pero se tenía que pensar en algo más. Fue entonces (un golpe de suerte o destino) que apareció nuestra «mecenas». Ella era una empresaria que se alojaba en uno de los hoteles más chics de la isla, le encantaba y valoraba muchísimo la artesanía de la isla. La habíamos conocido unos años atrás. Se alegró mucho de vernos, nos contó que había cogido en gestión cuatro tiendas en cuatro lujosos hoteles de las baleares y que necesitaba ropa para llenarlas. Ella sabía que no teníamos experiencia ni formación en el mundo de la moda, pero estaba convencida que nos teníamos que dedicar a eso. «Todo lo demás ya aprendereis sobre la marcha…» decía. Y así fue, creamos nuestra primera marca «CORA».